Es fácil disimular lo que sientes con palabras, pero cuando se trata de la disposición del cuerpo debes saber que, sin importar cómo te encuentres, siempre estás comunicando y revelando. Es aquí donde toma importancia el coaching cuando hablamos de corporalidad.
El cuerpo no miente. Es un reflejo directo de tu estado emocional, mental y espiritual, proyecta señales de manera espontánea. A diferencia del lenguaje verbal, no puedes controlar por completo cómo se manifiesta tu corporalidad, lo que la convierte en una fuente auténtica y poderosa de comunicación hacia afuera y hacia dentro.
El cuerpo es justamente la dimensión más olvidada, pues en el permanente hacer en el cual nos encontramos diariamente, resulta común el desconectarnos del mismo.
¿Qué función tiene el coaching con la corporalidad?
Es en este contexto que el coaching reconoce la importancia de trabajar con la dimensión corporal. Al explorar y comprender las posturas, gestos, expresiones faciales y movimientos corporales que proyectas, puedes descubrir aspectos ocultos de tu experiencia emocional y conectar con sensaciones y sentimientos.
Al prestar atención a lo que comunica el cuerpo, puedes identificar cómo tus emociones se reflejan en tu cuerpo y cómo estos patrones influyen en tus resultados. A partir de esta toma de conciencia, puedes explorar nuevas formas de ser, así como experimentar un mayor sentido de poder personal interno.
Cuando ajustas tu comunicación corporal de manera intencionada, puedes modificar la forma en que te percibes a ti mismo(a) y cómo te relacionas con los demás, abriendo así la puerta a cambios significativos en tu realidad.
Coaching ontológico y su enfoque holístico
El coaching Ontológico se distingue por ser una corriente de pensamiento profunda y enriquecedora que se sumerge en la esencia misma del ser humano. Va más allá de la superficie y se adentra en la comprensión integral de la persona, abordando no solo su comportamiento y acciones, sino también su forma de ser, su visión del mundo y sus interacciones con los demás.
Este no se limita a cambiar conductas superficiales, sino que busca una transformación profunda a nivel personal, familiar y profesional. El coach busca acompañar al cliente en su proceso de autorreflexión y autoconocimiento, brindándole las herramientas y el apoyo necesario para expandir su conciencia, desarrollar su potencial y alcanzar una mayor congruencia y plenitud en su vida.
El concepto de corporalidad y su relación con las emociones
Se trata de cómo te relacionas con el entorno a través de tu postura, gestos, contacto visual y expresión facial. A través de tu corporalidad, creas una conexión entre tu ser interno y el mundo exterior.
Observando y comprendiendo cómo dispones tu cuerpo, un coach puede identificar patrones, bloqueos o limitaciones emocionales que están presentes en ti. Estos aspectos pueden ser explorados y trabajados en profundidad para lograr un mayor desarrollo y crecimiento personal.
A través de vivencias y prácticas específicas, se fomenta tu toma de conciencia y la exploración de nuevas formas de disposición corporal que promuevan un mayor bienestar y éxito en diferentes áreas de tu vida.
Si quieres saber más sobre la importancia de alcanzar tu bienestar y vivir la vida en tus propios términos, escucha este episodio de mi podcast donde abordamos este tema junto a Julio Cañas.
¿Cómo influye la corporalidad en la forma de ser y actuar de las personas?
Cada vez que interactúas con otras personas, tu disposición corporal puede influir en la realidad que creas en ese momento y por ende en tus resultados.
Observa cómo te dispones físicamente en tus interacciones. Si adoptas una postura corporal agresiva o defensiva, es probable que la conversación se vea afectada por esa energía. Por el contrario, si mantienes una postura calmada y tranquila, la conversación tenderá a ser más armoniosa y pacífica.
Recuerda que tu cuerpo habla por ti, incluso cuando estás en silencio absoluto. Tu lenguaje corporal envía señales sutiles pero poderosas que impactan en la forma en que los demás te perciben y reaccionan ante ti. Por tanto, presta atención a cómo te posicionas, cómo mantienes el contacto visual y cómo te mueves en el espacio.
El coaching ontológico como herramienta para trabajar la corporalidad
A través de diferentes técnicas te ofrece herramientas para intervenir en tu corporalidad y adoptar nuevas posturas frente a diversas situaciones. Mediante la exploración y la experimentación, podrás descubrir el valor de adquirir una nueva corporalidad y cómo esto puede influir positivamente en tu vida.
Una vez que hayas experimentado el cambio en tu corporalidad, te sentirás motivado(a) a mantenerlo a lo largo del tiempo. Serás consciente del impacto que tiene en tus acciones, emociones y relaciones, lo que te impulsará a seguir cultivando una postura más alineada con tus objetivos y valores.
Recuerda que el proceso de transformación de la corporalidad es gradual y requiere práctica y perseverancia.
Principios del coaching ontológico
- Influencia del entorno: tú, como ser humano, nunca eres un producto terminado, siempre estás en constante transformación. Las experiencias de vida y los diferentes sistemas o entornos en los que te desenvuelves te moldean y ejercen una influencia en ti. Cada experiencia que atraviesas, cada interacción y aprendizaje que experimentas, te ayuda a desarrollar nuevas facetas de tu identidad. Estamos en un proceso de crecimiento y cambio continuo. A medida que te expones a diferentes experiencias, amplías tu mirada del mundo y expandes capacidades. Igualmente tú influyes en los sistemas en los cuales te desenvuelves y dejas huella.
- Posibilidad de cambio: no eres un ser estático, sino un ser dinámico que se adapta y se transforma a lo largo de la vida. Tienes la capacidad de aprender y crecer en cada momento. Cada día tienes la oportunidad de ser alguien diferente, de aprender, de mejorar y de descubrir nuevas dimensiones de ti mismo. Abraza los desafíos, aprende de tus experiencias y cultiva una actitud abierta hacia el cambio. Reconoce que eres un ser en constante devenir y celebra el potencial que reside en ti.
Cómo aborda la integración del cuerpo, emociones y acciones
En el coaching ontológico, tú eres visto como un ser completo donde las tres dimensiones fundamentales: lenguaje, corporalidad y emocionalidad, están interconectadas. Cuando realizas un cambio a nivel del lenguaje, esto genera una transformación en tu corporalidad, brindándote mayor confianza y apertura, y a su vez, se refleja en una emocionalidad más abierta y confiada.
Cualquier modificación que realices en cualquiera de estas tres dimensiones tendrá un impacto en las otras. El coaching ontológico trabaja con la integralidad de estas tres dimensiones, reconociendo que al abordar al cliente desde una de ellas, se generarán efectos en las demás de manera segura.
Por lo tanto, al enfocarte en el lenguaje y realizar cambios en tu forma de expresarte, también experimentarás una transformación en tu postura corporal y en la forma en que te relacionas con tu cuerpo. Esto a su vez influirá en tus emociones, permitiéndote vivir desde una mayor apertura y confianza.
¿Qué importancia tiene la corporalidad en el proceso de transformación personal y profesional?
Es fundamental comprender que el cuerpo es un vehículo poderoso de aprendizaje y transformación. Al explorar y trabajar con tu cuerpo, podrás experimentar cambios profundos en tu capacidad de relacionarte afectivamente. Aprenderás a disfrutar y conectar con el contacto físico, permitiendo que estos aprendizajes se arraiguen en tu ser y se mantengan a lo largo del tiempo.
Hasta que no trabajes tu cuerpo y aprendas de él, es decir, desarrollar una capacidad de sentirte bien con el contacto y la caricia, tanto al recibirlos como al darlos, no podrás aprender sobre la afectividad. Es a través del cuerpo que se produce un cambio significativo, profundo y duradero.
Beneficios de incorporar la corporalidad en el coaching ontológico
- Cuando el aprendizaje se integra a nivel del cuerpo, perdura en el tiempo y se profundiza aún más.
- La persona logra transmitir un mensaje congruente entre el lenguaje verbal y no verbal a través de su cuerpo.
- La corporalidad adecuada nos permite gestionar de manera efectiva los estímulos y reacciones de nuestro cuerpo, lo que resulta en la capacidad de adaptarnos y adoptar hábitos saludables para nuestro bienestar.
- Te brinda la oportunidad de identificar y superar tus propias limitaciones, lo que te permite potenciar tu éxito personal y alcanzar un crecimiento interior significativo.
- Mejora de la autoconciencia y autoconocimiento a través de la conexión con el cuerpo.
- Facilita la expresión y gestión emocional.
- Potencia la capacidad de acción y logro de objetivos.
Técnicas y prácticas de coaching ontológico para trabajar la corporalidad
Ponerte en contacto con tu respiración
Explorar y conectar con tu respiración es una valiosa técnica de coaching corporal que puede tener un impacto significativo en tu bienestar y desarrollo personal. La respiración es una función vital de nuestro cuerpo, pero también puede servir como una poderosa herramienta para gestionar nuestras emociones, reducir el estrés y aumentar nuestra capacidad de atención y enfoque.
Al prestar atención consciente a tu respiración, puedes empezar a notar cómo se relaciona con tu estado emocional y físico. ¿Está tu respiración agitada y superficial cuando te sientes estresado o ansioso? ¿O es profunda y calmada cuando estás relajado y en paz? Observar estos patrones te brinda información valiosa sobre tus respuestas automáticas y cómo te afectan.
Trabajar con los cuatro elementos
Explorar y trabajar con los cuatro elementos (agua, tierra, fuego y aire) es una poderosa técnica de coaching corporal que puede ayudarte a encontrar equilibrio y armonía en tu vida. Cada uno de estos elementos representa diferentes aspectos de nuestra experiencia física, emocional y mental, y aprender a reconocer y ajustar su presencia en nosotros puede tener un impacto significativo en nuestro bienestar.
- El agua simboliza la fluidez, la adaptabilidad y las emociones. Al trabajar con el elemento agua, puedes explorar tus patrones emocionales y cómo fluyen a lo largo de tu día a día. ¿Te encuentras en exceso de emociones, desbordado y necesitando establecer límites? ¿O te encuentras con un déficit de emociones, desconectado y necesitando abrirte más a tus sentimientos? Al tomar conciencia de tu relación con el agua, puedes encontrar formas de equilibrar y gestionar tus emociones de manera saludable.
- La tierra representa la estabilidad, la solidez y la conexión con nuestro cuerpo físico y el entorno. Trabajar con el elemento tierra implica explorar cómo te sientes arraigado y conectado con tu cuerpo. ¿Te encuentras en exceso de tierra, demasiado rígido y necesitando flexibilidad? ¿O te encuentras en déficit de tierra, desenraizado y necesitando establecer una base sólida? Al honrar y nutrir tu relación con la tierra, puedes encontrar un equilibrio entre la estabilidad y la adaptabilidad en tu vida.
- El fuego simboliza la pasión, la energía y la acción. Al trabajar con el elemento fuego, puedes explorar tu nivel de motivación, entusiasmo y vitalidad. ¿Te encuentras en exceso de fuego, quemándote rápidamente y necesitando un enfoque más equilibrado? ¿O te encuentras en déficit de fuego, sin chispa y necesitando encender la llama de la pasión? Al cultivar una relación saludable con el fuego, puedes encontrar la energía y el impulso necesarios para perseguir tus metas y sueños.
- El aire representa la mente, la comunicación y la claridad mental. Trabajar con el elemento aire implica explorar cómo fluyen tus pensamientos y cómo te comunicas contigo mismo y con los demás. ¿Te encuentras en exceso de aire, con una mente hiperactiva y necesitando encontrar calma y enfoque? ¿O te encuentras en déficit de aire, con dificultades para expresarte y necesitando abrirte a nuevas ideas? Al cultivar una relación equilibrada con el aire, puedes encontrar la claridad mental y la comunicación efectiva en tu vida.
Empieza a tomar conciencia de tu corporalidad
En conclusión, la corporalidad desempeña un papel fundamental en la forma en que nos relacionamos con el mundo y nos comunicamos con los demás. A través de nuestra postura, gestos y expresiones faciales, transmitimos mensajes que van más allá de las palabras.
El coaching ontológico nos brinda la oportunidad de tomar conciencia de nuestra corporalidad y trabajar en su transformación, permitiéndonos adoptar posturas más confiantes, abiertas y empoderadas. Al integrar el aprendizaje a nivel del cuerpo, logramos cambios significativos y duraderos, impactando positivamente en todas las áreas de nuestra vida.
No subestimes el poder de tu corporalidad y comienza a explorar cómo puedes utilizarla como una herramienta para expresarte de manera auténtica y generar resultados extraordinarios. Si no sabes por dónde empezar, me encantaría acompañarte. Agenda tu primera sesión y estaré encantada de guiarte en este camino.
