Cómo Manejar el Síndrome del Año Nuevo

Se caracteriza por comportamientos como:

  • No saben por dónde comenzar.
  • Se llenan de una euforia que puede esfumarse peligrosamente (efecto gimnasios y dietas de emergencia).
  • Crean sueños como castillos en donde hay altas dosis de fantasía.
  • La gasolina se consume y no llega a finales de enero.
  • Para atender este Síndrome, he creado “CONCRETA 2019”, un plan de coaching para acompañarte en el proceso de alineación de tus acciones en función de tus objetivos.

Considera los siguientes puntos para manejar efectivamente el síndrome:

  • El que mucho abarca poco aprieta: escoge el objetivo, tanto a nivel personal como laboral, clave para llegar a diciembre 2019 diciendo lo que quieres decir. Ejemplo: “Logré cambiar mis hábitos alimenticios”. Allí el objetivo pudiera ser “alcanzar un estado físico óptimo en peso y apariencia”. La meta cuantificable sería algo como “Perder 1 kilo por mes al año”.
  • “Soplar y sorber, no puede ser”. Cortar la ruta al objetivo en tramos que te lleven a definir estaciones (milestones) que te sirven para medir el avance. Por ejemplo llegar al kilo 5, celebrarlo, evaluar la estrategia y corregir.
  • «Más vale un pájaro en mano que 100 volando»: evitar los distractores y saboteadores que, al apartarlos, no te restan y te suman productividad. Ejemplo: Salir todos los días a eventos sociales que propician la ingesta de calorías. Establecer bloques de trabajo sin interrupciones es adecuado para no caer en esto.
  • No te puedes bañar en todos los chorritos: me refiero a la importancia de cambiar los hábitos que te desenfocan del momento presente. Ejemplo: Contestar mensajes a todo el que te escribe, decirle Sí a cualquier petición, comentar cualquier post en las redes, etc… Para ello hay que trabajar la necesidad de estar presente con todos y en todo.
  • No siempre “camarón que se duerme, se lo lleva la corriente”. Dormir, hacer pausas y diversión ayudan a incrementar la productividad. Si trabajas temas como el miedo a fracasar podrás descansar sin sentir culpa.
  • “Vísteme despacio que estoy apurado”. A veces llega al destino más rápido la tortuga que la liebre. Se trata de llegar al final del camino sin llagas en los pies y en el alma. Los vínculos importantes no se sacrifican, se cultivan.

¿Cómo te sientes para empezar tu recorrido por este año? Si estás interesado en conocer más detalles del plan “CONCRETA 2019”, envía tu solicitud por el formato de contacto en mi página web.

 

Andreina Atencio M.
Coach Senior
IG: @coachandreina

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