Escrito por María Andreina Atencio
Nutricionista-Dietista
Magister en Entrenamiento y Nutrición Deportiva
Una de las transiciones más complejas, es la integración del rol de madre y profesional. Aunque hay muchos libros y artículos que hablan y orientan sobre el tema, es un proceso muy personal que ciertamente cada quien lo vive de forma diferente.
En mi experiencia personal, he sido como un malabarista. Las prioridades en mi vida han ido cambiando desde que soy mamá, no obstante, trato de disfrutar cada momento siendo profesional de la nutrición y mamá a tiempo completo.
A mis hijos les dedico tiempo de calidad, los acompaño a sus actividades, fiestas y juego con ellos. Afortunadamente, mi trabajo me permite tener flexibilidad en el horario. Mis días se dividen entre ejercicios, los cuales los comienzo muy temprano por la mañana cuando mis hijos mayores están en el colegio y con esto me aseguro de poder entrenar, para afrontar el día a día con mucha energía, brindar asesorías personalizadas a mis pacientes y estudiar para mantenerme actualizada. Esto yo lo llamo una vida caóticamente maravillosa.
Si tú que me estás leyendo, te sientes identificada, hay un dicho muy cierto que dice “El que mucho abarca poco aprieta”. Según lo que a mí me ha funcionado, la integración de estos roles implica darte la oportunidad de delegar las tareas del hogar, organizar tu trabajo y priorizar. Hacer una lista de prioridades te ayudará a organizarte mejor. No te creas mujer maravilla, a veces es mejor admitir que no puedes con todo y se vale pedir ayuda. Considera también darte un tiempo para tí, para tus cuidados, desde ir a la peluquería o caminar al aire libre, hasta salir con tus amigos.
Por otro lado, te será útil reflexionar sobre tus propósitos a corto, mediano o a largo plazo en cada uno de tu roles; escríbelos y traza un plan con actividades, fechas y plazos para alcanzarlos. Esto te mantendrá motivada y enfocada. Y por supuesto, al poner en práctica tu plan de acuerdo a tu lista de prioridades, ve tachando todo lo que hayas cumplido y así te sentirás satisfecha de irlas cumpliendo poco a poco.
A mis 35 años tengo los roles que siempre he soñado. No soy perfecta, pero me siento orgullosa. Ser mamá me hizo más mujer, mi profesión me ha dado la seguridad para ser mejor esposa y ejemplo para mis hijos. Mis padres han sido de gran apoyo, ellos me impulsaron durante mis estudios. Mi hermana mi cómplice, mi esposo mi fuerza y el empuje, y mis hijos mi mayor motivación, lo que demuestra que hacer aliados te alivia el camino.
Siempre con proyectos profesionales en mente, algunos en stop por ahora, como por ejemplo un libro que hice durante el año 2021, que pronto lo estaré sacando al público con el favor de DIOS.
Mi profesión como nutricionista y mi otra profesión ser madre de 3 es tan complicada como perfecta cohesión en mi vida rutinaria, sirviendo como complemento perfecto y disfrutando al máximo las épocas y los tiempos en donde debo dar alternancia a tan demandantes tareas.
